En el Kosair Childrens Hospital, al recibir como paciente a Roland Lian, un niño de 14 meses, decidieron probar un nuevo método de estudio.
Al revisar el corazón del niño se descubrió que había nacido con graves defectos en su órgano vital, por lo que era necesario operarlo, pero intervenirlo quirúrgicamente requería conocer exactamente el corazón del pequeño. Por ello, el cirujano Erie Austin pensó que el novedoso método de impresión 3D podía ayudarlos.
Austin recurrió a la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Louisville para plantearles su proyecto. Así inició una colaboración que tuvo como primer paso la compra, entre el Hospital y la Facultad, de una impresora MakerBot. Con la impresora se pudo reproducir el corazón del niño al doble del tamaño del original, y así se pudieron determinar las afecciones exactas.
La impresión 3D mostró que Roland había nacido con un agujero en el corazón, así como con deformaciones en la aorta y en la arteria pulmonar, gracias a ello, al momento de la operación no se perdió tiempo y la cirugía pediátrica fue un éxito. Actualmente, Roland Lian se encuentra recuperándose de la exitosa operación.
Fuente Metronoticias
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